Constantemente vemos como muchas personas que están buscando empleo se quejan de que no les dan la oportunidad, ya sea por que carecen de experiencia o por su edad (o muy jóvenes o muy viejos), porque siempre el puesto se otorga por argolla o simplemente por su aspecto físico (en el caso de las mujeres principalmente).
Pero ¿qué pasa con la otra cara de la moneda? que tienen que decir los empresarios o responsables de las contrataciones en base a sus experiencias...
Durante varias semanas me dí a la tarea de conversar con algunos de estas personas para ver cuales eran sus experiencias, en algunos casos fuí testigo de lo que les sucedía y que según comentaron era más frecuente de lo que ellos quisieran aceptar...
Vamos a ver algunas de sus observaciones:
1- En el caso de personas jóvenes el comentario más frecuente ha sido la falta de compromiso con el trabajo, curiosamente mientras por un lado yo les pedía se abrieran a dar empleo a personas sin experiencia, por el otro ellos me demostraban como los puestos son abandonados a los pocos días de haber sido ocupados. Con semejante panorama, ¿cómo va uno a cuestionarles algo? No se puede juzgar a toda una generación de jóvenes por algunos pocos pero lo cierto es que esos pocos les ponen el camino más difícil a los que si quieren hacer las cosas bien.
A este respecto mi consejo es muy simple, no coloquen currículum en cuanta oportunidad de empleo se ofrece, antes de hacerlo imagínense si realmente les gustaría ocupar esa plaza, si no es así mejor absténganse.
2- La siguiente queja de los empresarios viene ligada a la moda por decirle de alguna forma. En este caso he visto y escuchado de todo... Desde jóvenes varones que llegan a una empresa a una entrevista con los pantalones casi a la rodilla, hasta las jovencitas que disculpen la expresión, parece que andan viendo quien se las levanta, en lugar de ir a buscar trabajo.
Esto ya lo he mencionado en otro artículo, toda empresa tiene una imagen que cuidar y si la persona interesada en un empleo no da la imagen adecuada, por más títulos, experiencias y ganas de trabajar, es muy posible que pierda la oportunidad.
Recordemos que cuando estamos buscando trabajo, lo que en realidad estamos haciendo es vendiendo nuestro servicio, nuestro tiempo, o sea, somos nuestro propio producto, y como tal la envoltura es muy importante...
Hay otros comentarios pero por el momento lo vamos a dejar acá, pero si algún empresario quiere aportar sus propias experiencias, con toda confianza!
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Pero ¿qué pasa con la otra cara de la moneda? que tienen que decir los empresarios o responsables de las contrataciones en base a sus experiencias...
Durante varias semanas me dí a la tarea de conversar con algunos de estas personas para ver cuales eran sus experiencias, en algunos casos fuí testigo de lo que les sucedía y que según comentaron era más frecuente de lo que ellos quisieran aceptar...
Vamos a ver algunas de sus observaciones:
1- En el caso de personas jóvenes el comentario más frecuente ha sido la falta de compromiso con el trabajo, curiosamente mientras por un lado yo les pedía se abrieran a dar empleo a personas sin experiencia, por el otro ellos me demostraban como los puestos son abandonados a los pocos días de haber sido ocupados. Con semejante panorama, ¿cómo va uno a cuestionarles algo? No se puede juzgar a toda una generación de jóvenes por algunos pocos pero lo cierto es que esos pocos les ponen el camino más difícil a los que si quieren hacer las cosas bien.
A este respecto mi consejo es muy simple, no coloquen currículum en cuanta oportunidad de empleo se ofrece, antes de hacerlo imagínense si realmente les gustaría ocupar esa plaza, si no es así mejor absténganse.
2- La siguiente queja de los empresarios viene ligada a la moda por decirle de alguna forma. En este caso he visto y escuchado de todo... Desde jóvenes varones que llegan a una empresa a una entrevista con los pantalones casi a la rodilla, hasta las jovencitas que disculpen la expresión, parece que andan viendo quien se las levanta, en lugar de ir a buscar trabajo.
Esto ya lo he mencionado en otro artículo, toda empresa tiene una imagen que cuidar y si la persona interesada en un empleo no da la imagen adecuada, por más títulos, experiencias y ganas de trabajar, es muy posible que pierda la oportunidad.
Recordemos que cuando estamos buscando trabajo, lo que en realidad estamos haciendo es vendiendo nuestro servicio, nuestro tiempo, o sea, somos nuestro propio producto, y como tal la envoltura es muy importante...
Hay otros comentarios pero por el momento lo vamos a dejar acá, pero si algún empresario quiere aportar sus propias experiencias, con toda confianza!
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